El pino negro: el árbol que vive a más altura

Pino negro (Pinus uncinata)

El pino negro puede llegar a los 25 metros de altura, le gusta el suelo húmedo y crece mejor en las solanas que en las zonas de sobra. Puede vivir entre los 1,600 metros y 2,400 metros, aunque también podemos encontrar algunos ejemplares hasta los 2,700 metros o descender hasta los 1,400 metros.

Es un pino muy resistente capaz de vivir bajo condiciones duras de frío, nieve, viento y pendientes pronunciadas, condiciones que ninguna otra especie de árbol en la Península soporta tan bien (excepto el abeto en algunos casos). Es de crecimiento lento por las condiciones de bajas temperaturas en las que vive.

En su nivel inferior puede formar bosques con los abetos, hayas y pino albar. Puede hibridar con este último, es decir, que el polen de uno poliniza al otro y crecen árboles con características intermedias entre las dos especies.

Sus piñas se parecen a un erizo

Las piñas del pino negro se pueden reconocer porque son muy asimétricas, como un pequeño erizo, y tienen escamas ganchudas y prominentes.

Otro rasgo característico del pino negro es que sus hojas son cortas (3-8 cm de largo) y se mantienen verdes hasta los 5 años formando un follaje muy denso y verde oscuro. Además, es un árbol acostumbrado a soportar la nieve, así que sus ramas son muy flexibles y su tronco puede aparecer curvado por el peso de la nieve.

Su amenaza son los aludes

Los incendios afectan poco a los pinares de pino negro, en contraste, estos bosques se enfrentan a menudo al efecto de los aludes. Los aludes son masas de nieve o de hielo que se desprenden y se desplazan montaña abajo. Los más graves son los llamados aludes excepcionales, puesto que su paso nos deja un paisaje tan devastador como el que provoca un incendio en otros ambientes.

Los aludes son más frecuentes en las cotas altas, porque las pendientes son más inclinadas y la nieve más inestable. Los únicos capaces de soportar esta masa de nieve son los pinos más jóvenes que tienen mucha flexibilidad.

En cotas más bajas los aludes son menos frecuentes, encontramos vegetación más alta y compleja y pinos más grandes. El problema es que si un alud excepcional afecta a las cotas más bajas, arrastrarán el bosque y encontraremos gran cantidad de madera muerta, especialmente en las zonas laterales y en la parte inferior.

Su madera es de mucha calidad

El pino negro tiene una madera blanda, fácil de trabajar y de mucha calidad. Por estos motivos, se ha explotado desde la antigüedad, así que, como otras coníferas de montaña como por ejemplo el pino albar y el pino salgareño, destaca su uso en construcción. La tala para ganar zonas de pasto también ha sido históricamente intensa. También se ha aprovechado la pega que se obtenía a partir de la resina.

El problema es que la explotación de su madera y la tala redujeron su superficie mucho a finales del siglo XIX, hasta el punto de que se tomaron medidas de protección. Uno de los objetivos de estas medidas fue evitar las inundaciones de los ríos, puesto que los pinos negros situados en las cabeceras de los ríos tienen una función física e hidrológica que evita inundaciones.

Actualmente su madera se utiliza principalmente para el embalaje industrial, los palos de teléfono, la astilla, instrumentos musicales, muebles, etc.

En sus pinares habita fauna característica del paisaje subalpino

Los anfibios son muy escasos en los pinares de pino negro. Podemos encontrar la salamandra, el tritón pirenaico (Calotriton asper) o la rana bermeja (Rana temporaria). También hay poca cantidad de reptiles, pueden vivir entre estos pinares el lagarto ágil (Lacerta agilis), la lagartija vivípara (Zootoca vivipira) y la víbora áspid (Vipera aspis).

Los pájaros más característicos son el urogallo común (Tetrao urogallus), el mochuelo boreal (Aegolius funereus), el mirlo capiblanco (Turdus torquatus), el verderón serrano (Carduelis citrinella), el reyezuelo sencillo (Regulus regulus) y el agateador norteño (Certhia familiaris). También encontramos en abundancia el pinzón vulgar (Fringilla coelebs) y el petirrojo europeo (Erithacus rubecula).

En cuanto a los mamíferos, los más habituales son el ratón de campo (Apodemus sylvaticus) y la ardilla (Sciurus vulgaris). Aunque podemos encontrar más especies como, por ejemplo, la musaraña bicolor (Sorex araneus) y la musaraña tricolor (Sorex coronatus), entre otras. Los carnívoros más comunes son la marta (Martes martes) y el gato montés (Felis silvestris), pero también puede haber presencia del oso pardo (Ursos arctos).

El lagarto ágil, el urogallo común y el oso pardo son especies amenazadas.

Típico en las zonas de alta montaña de España

Podemos encontrar el pino negro en los Alpes, los Pirineos y el centro de España. En las provincias de Teruel (Sierra de Gúdar) y Soria (Sierra Cebollera). Forma masas muy grandes en las provincias de Lérida, Gerona, Tarragona y Huesca.

En Cataluña se extienden por todos los Pirineos, desde la Valle d’Aran hasta el Valle de Campodron, y también por el Pre-pirineo, y es el límite sur de las sierras más meridionales (Boumort, Carreu, Port del Compte i Rasos de Peguera).

Descarga la ficha del pino negro.

Descarga infografía para identificar las diferentes especies de pinos.

Referencias

Les pinedes de pi negre: Manuals de gestió d’hàbitats (Diputació de Barcelona, 2012/2017)

Ginés López González (1994) La guía de Incafo de los árboles y arbustos de la península ibèrica, Madrid (España), Incafo

Jaume Llistosella i Antoni Sànchez Cuxart (2015) Guia il·lustrada per a conèixer els arbres (3a edició), Barcelona (Espanya), UBe

Imagen destacada: pino negro. Autor: ressotaelspeus, Natusfera.

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